Revisando mi blog encontré lo que escribí hace poco más de dos meses, exactamente el 7.21.2011, y me puse a comparar eso que me pasaba con lo que me pasa ahora. Me encanta comprobar que todo eso que sentía, es lo mismo que sigo sintiendo y pensando hoy, pero muchísimo más fuerte. Me encanta comprobar que sigo eligiendo sus besos, sus manos, sus abrazos, su cuerpo, su amor, y no el de otro. Sé que muchos pueden pensar, "y sí, recien pasaron dos meses, ¿como no va a seguir siendo lo mismo?". Pero esto que me pasa no me paso nunca antes, esto mismo es lo que me va a seguir pasando siempre mientras lo tenga a él mi lado. Verlo a él, mirarlo y no ver a nadie más. Tenerlo a mi lado, agarrados y perdidos entre lo que nos pasa. Me encanta, me hace feliz despertarme cada día sabiendo que me espera el hombre más increíble que conocí, ese hombre que me cuida, en el que confío, que me llena de sonrisas, con el que puedo contar cuando estoy bien, cuando estoy mal, cuando estoy de mal humor; ese que me puede cambiar el humor en dos segundos. Me da todo y me llena de paz, de tranquilidad. Porque apareció cuando menos lo esperaba, llegó para hacerme la mujer más feliz, aceptandome y eligiendome así como soy, sin pedirme que cambie, bancandose mis defectos y estando a mi lado para crecer juntos, contando con esa confianza hermosa que construimos. Es imposible no sonreir sabiendo que lo tengo a él, sabiendo que lo amo, que me ama, que lo voy a cuidar cada día, que vamos a seguir compartiendo miles de cosas juntas, planeando tantas otras, y sobretodo haciendonos felices el uno al otro. 

En tus ojos olvidé mis miedos, en tus ojos encontré un sendero que me lleva a lo más profundo de mi ser; en tus ojos despertó mi cuerpo, en tus ojos reviví el fuego que recorre todos los rincones de mi piel. En tus ojos encontré la vida, en tus ojos 

descubrí el cielo y guardé la llave más secreta de mi corazón; en tus ojos encontré 

la magia, en tus ojos desnudé mis sueños, descubrí que es posible morir de amor.. 

Esa luz que hay en tus ojos vivirá por siempre en mí.